Aquí les dejo mi experiencia de esta ciudad maravillosa.
El avión me encanta pero siempre antes de despegar ya me empiezan los nervios, a sudar y ya con el despegue viene el apretón de mano a mi hija o a mi marido al que tenga al lado y si estoy en el medio de los dos a la vez mejor jejejejeje
Pasear por la calle de Lisboa me encanto y recuerdo la experiencia con cariño, es una ciudad que tiene muchos atractivos para el turista y además es muy asequible para el bolsillo.
En el barrio de belén comimos los típicos pasteles en una pastelería muy famosa que todos los blog recomiendan, no me acuerdo su nombre pero sé que era con los tordos azules con blanco, está en la avenida principal de Belén y donde vean un montón de gente afuera haciendo cola ahí es, vale la pena la espera para los pasteles.
Después cogimos el mítico tranvía y ahí parecía la propia niña pequeña de lo emocionada que estaba.
En la torre de belén, mi marido y mi hija subieron y yo me quede abajo porque soy un poco castro fóbica así que me tomaron una foto desde arriba ¡¡que malos!! jejejejejeje
En el monumento de los exploradores portugueses, igual yo me quede abajo, es impresionante grande que era.
Monasterio de los jerónimos ya por la tarde.
Hay numerosas subidas de la ciudad, quede encada de la experiencia y pensé que Lisboa me podía decepcionar pero todo lo contrario tiene su encanto así que satisfecha
Pero para mí lo más espectacular fue Sintra (a unos 25 km. de Lisboa), el palacio da pena, sus jardines, su pueblo que es encantador.
Así que como digo siempre, ¡volveré!
1 comentario
Me gusta fotos preciosas muy buen gusto